Todos los días aparecen noticias en los medios de comunicación sobre el quehacer diario de los Vigilantes de Seguridad, unas provocan alegría y otras tristeza, pero que son las incidencias a las que estos profesionales tienen que enfrentarse en sus centros de trabajo.
Por ello reivindicamos una vez mas, que se les valore en la medida del servicio que prestan a la sociedad, y que quede claro que estos trabajadores son los que ponen su físico y en ocasiones su vida en riesgo, para que los ciudadanos que asisten a los centros públicos o privados donde estos profesionales realizan su trabajo, puedan realizar su actividad de manera tranquila y segura.
Una vigilante de Seguridad del Hospital de Gandía (Valencia) evita que un paciente psiquiátrico se suicide.
Un paciente ingresado en la planta de psiquiatría de este hospital, logro esquivar a los cuidadores de esta planta y estuvo a punto de tirarse por una ventana, acción que no pudo llevar a cabo, ya que la única vigilante que presta servicio de forma habitual en este centro, lo evitó.
Esta vigilante de seguridad, al intuir las intenciones de este paciente comenzó un dialogo con el mismo logrando el que desistiese de sus planes, dando tiempo hasta la llegada del personal del Centro que consiguió reingresarlo en su habitación.
Felicitamos a esta compañera que trabaja en la empresa SIC, por su profesionalidad y buen hacer.
El Complejo Hospitalario Universitario de Huelva emite un comunicado condenando las agresiones sufridas esta semana por dos vigilantes de seguridad.
Los sindicatos denuncian la agresiones sufridas esta semana en este centro hospitalario, el martes y el miércoles, por dos trabajadores, uno de seguridad privada y el otro auxiliar de servicios, en el servicio de Urgencias del hospital Juan Ramón Jiménez, “al llamar la atención a unos usuarios que con su comportamiento estaban molestando al resto”.
Esto ha motivado el que los sindicatos lo denuncien ante la Subdelegación del Gobierno y el Departamento de Seguridad Privada del Cuerpo Nacional de Policía, “exigiendo el aumento de la plantilla de seguridad privada como medida disuasoria que impida que algunos usuarios de los servicios sanitarios se vean capaces de agredir a este personal”.
“Lo que no es de recibo es que intereses económicos puedan prevalecer sobre la seguridad y la salud de los trabajadores”.
En ambas denuncias se exige adecuar el servicio a los riesgos inherentes a los mismos, “pues si no se procura la seguridad del personal de seguridad difícilmente podrán velar por la de los usuarios y la plantilla de los centros sanitarios”.
El Complejo Hospitalario Universitario de Huelva ha emitido también un comunicado en el que condena las agresiones sufridas, mostrando su solidaridad con los profesionales afectados. Según el centro, ambos sucesos, que se produjeron entre los días 5 y 6 de julio, tuvieron lugar en el área de Urgencias del Hospital Juan Ramón Jiménez y fueron protagonizados por individuos aislados que actuaron de forma sorpresiva y que no reflejan el comportamiento habitual de los usuarios.