La concentración se ha realizado sin incidentes y con la asistencia de unas 40 personas, se han repartido octavillas por la terminal de aeropuerto.
La Delegación de Gobierno de Baleares una vez más en repuesta a la concentración, ha mostrado su verdadero talante, ya que ha impedido que los manifestantes entrasen dentro de la terminal, coartando así la libertad de expresión y de manifestación.
Los manifestantes han estado unas dos horas.
Ademas se prevee una nueva concentración para el mes de septiembre, esta manifestación ha estado coordinada con otros aeropuertos Españoles.
No deja de sorprender que la seguridad de las instalaciones aeroportuarias y de los usuarios e las mismas, solo sean importantes segun lo estime AENA. Y no siga unos canones de seguridad internacionales.