La sentencia establece que se produjo un forcejeo porque el acusado intentó acceder a las zonas comunes del centro por la parte de Urgencias.
El área de Urgencias es una de las zonas en las que se viven más momentos de tensión en los centros hospitalarios. Uno de estos capítulos tuvo lugar al final del año pasado en el Hospital Clínico de la capital. Unos hechos por los que un hombre ha sido condenado a pagar 870 euros por pegar y amenazar a un vigilante de seguridad que estaba trabajando en este área.
En concreto, los hechos sucedieron sobre las 17.20 horas del pasado 30 de diciembre. Entonces uno de los guardias de seguridad que se encontraba de servicio en esos momentos en el centro se percató de que un hombre quería acceder a las instalaciones comunes del Clínico pasando por el servicio de Urgencias.
Por ello, el trabajador le informó de que se trataba de una zona que no estaba habilitada como entrada al hospital. Siempre según se recoge en la sentencia dictada por la Sección Novena de la Audiencia Provincial de Málaga, el hombre no hizo caso al vigilante y volvió a intentar pasar por Urgencias, algo que le fue nuevamente impedido.
"Paso por cojones"
Pero sus palabras no lograron amedrentar al vigilante de seguridad, que le acompañó hasta el exterior del área donde se estaban produciendo los hechos. Al parecer, allí se produjo un forcejeo entre los dos y el condenado amenazó al trabajador con apuñalarle, mientras buscaba en un bolso personal algún tipo de objeto.Entonces fue cuando la situación se puso más violenta. En la resolución judicial se asegura que el acusado reaccionó gritando: «Paso por aquí por cojones, me voy a abrir una ficha de urgencias y paso por cojones».
Ante esta situación y temiendo que este individuo pudiese portar algún tipo de arma blanca y llegar a cumplir su amenaza, el vigilante de seguridad redujo al acusado. En la sentencia se expone que, como consecuencia del forcejeo, fue golpeado con una patada en la rodilla.
El Juzgado de Instrucción número 5 de Málaga condenó a este hombre como autor de una falta de lesiones y otra de amenazas. Por ello, le impuso el pago de dos multas que ascienden a una cantidad de 600 euros y a indemnizar a la víctima con 270 euros.
Pese a que se interpuso un recurso contra esta resolución judicial, ahora la Audiencia Provincial de Málaga lo ha desestimado y ha corroborado la decisión del citado juzgado de instrucción. Esta última sentencia ya no se puede recurrir.