Un joven ha sido agredido por un vigilante de seguridad de la estación de Renfe en Málaga mientras se dirigía, junto a su pareja, a un restaurante para celebrar su aniversario.
- El agresor les insultó con varios comentarios homófobos y, cuando la pareja se disponía a abandonar el lugar, el vigilante corrió hacia ellos y agredió a uno de los jóvenes, lesionándole el ojo.
La pareja conformada por Álvaro y Sebas se disponía a celebrar su aniversario, cuando el primero de ellos fue agredido por un guarda de seguridad que trabaja en la estación de Renfe de Málaga. Según la pareja, el guarda de seguridad en la calle comenzó a insultarles con comentarios homófobos como "maricones de mierda". La pareja decidió alejarse del sitio en el que se encontraban, pero en ese momento, el vigilante corrió hacia la pareja y comenzó a agredir a Álvaro. Aunque ya habían tenido algún problema con el guarda, nunca se había producido agresión de ningún tipo. Sin embargo, en esta ocasión Álvaro acabó en el Clínico de Málaga con lesiones graves en su ojo derecho y probablemente algún hueso roto.
"Pasear con tu pareja por la calle se ha convertido en una situación de alto riesgo. Aquí veis las consecuencias de haberme arriesgado a salir a la calle", comentó Álvaro en la fotografía que subió a su cuenta de Instagram.
"No podemos andar por Málaga tranquilamente sin que algún bala perdida nos haga cosas así, así que por favor decid no a la homofobia, que ya estamos en unos tiempos donde se debería aceptar la sexualidad de cada cual sin repercusión alguna", comentó la víctima a través de las redes sociales.
Esto señores es la sociedad en la que vivimos hoy en día. Pasear con tu pareja por la calle se ha convertido en una situación de alto riesgo. Aquí veis las consecuencias de haberme arriesgado a salir a la calle; claro si hubiera sabido que un "primate" andaba suelto por Málaga me fuera quedado mejor en casa. En conclusión, hay dos clases de personas; las que respetan todo y las que no respetan nada e incluso tampoco la condición sexual y a mi desde luego que no me ha tocado las personas civilizadas.