Declaran probado que los trabajadores «procedieron a discutir la forma de perjudicar a su empresa tanto con denuncias como a través de bajas por enfermedad sorpresivas»
La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Región de Murcia ha confirmado la sentencia de un juzgado. Ésta declaró procedente el despido de tres empleados de una empresa de seguridad que quitaron clientes a la compañía. El tribunal retira la multa de 900 euros impuesta a cada uno.
La sentencia indica que el juzgado de lo Social que estudió inicialmente el caso declaró probado que los tres trabajadores de esta firma se encontraron en una urbanización «y procedieron a discutir la forma de perjudicar a su empresa tanto con denuncias como a través de bajas por enfermedad sorpresivas». Al día siguiente, asimismo, «estuvieron hablando en un local acerca de cómo perjudicar a la demandada quitándole clientes y llevándoselos a la empresa creada por la hermana de uno de ellos, procediendo para ello a visitar a clientes de su empleador y ofrecerles mejores condiciones».
El relato de hechos probados que realizó el juzgado explicaba igualmente que, «en fecha no determinada, uno de los despedidos pidió a un compañero que le golpeara con su vehículo particular mientras aquél estaba de servicio conduciendo un vehículo de la empresa, con objeto de simular unas lesiones y así poder acogerse a una baja médica durante diez meses».
El juzgado de lo Social declaró procedente el despido de los tres, a cada uno de los cuales impuso una multa de 900 euros, al considerar que habían actuado con temeridad al plantear la demanda contra su empresa.
Ahora, la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia ha confirmado la procedencia del cese de la relación laboral, pero no así la imposición de la multa, al entender que la misma no está justificada.
