El juez impone a la acusada sendas multas por dos faltas leves de amenazas
El Juzgado de lo Penal número 5 de Almería ha condenado a una mujer que amenazó a un auxiliar de seguridad y a una vigilante del Hospital de Torrecárdenas.
La sentencia, consultada por Diario de Almería, recoge que sobre las tres y media de la tarde del 19 de mayo de 2015, la acusada M.R.S., se dirigió al Hospital de Torrecárdenas para acompañar a su marido, quien estaba siendo asistido.
Una vez allí, bajo un estado de excitación, intentó acceder al servicio de urgencias, exigiendo al auxiliar de seguridad del hospital que abriese la puerta de acceso, espetándole: "Ábreme la puerta o la rompo".
El hombre accedió a abrir dicha puerta para evitar que la rompiese y le preguntó dónde iba, ante lo que la mujer se abalanzó sobre él y le lanzó el brazo derecho para agredirlo, si bien éste pudo evitarlo sujetándola.
Al acercarse la vigilante de seguridad que se encontraba en el lugar, la mujer les dijo a ambos: "Como a mi marido le pase algo, como le pasó a mi padre, que se murió por culpa de los médicos, os voy a matar a todos".
Asimismo, le dijo que les iba a "pegar dos tiros" porque "todos los gitanos tenemos revólver y pistolas y tú no te libras hoy en la salida", entre otras amenazas, como "Almería es muy pequeña, donde os pille os vais a enterar, me he quedado con vuestras caras".
Esta conducta provocó en las víctimas un estado de "temor y desasosiego".
Por estos hechos, M.R.S. ha sido condenada a 40 días de multa, con una cuota diaria de seis euros, por sendas faltas de amenazas leves, y se le prohíbe aproximarse a las víctimas a menos de 200 metros durante seis meses.
La sentencia no es firme y contra ella cabe interponer un recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Almería en un plazo de diez días a partir de su notificación.
Cabe recordar que, según los datos del último año facilitados a Diario de Almería por la Delegación Territorial de Salud de la Junta, en dicho ejercicio se notificaron un total de 36 agresiones en centros sanitarios públicos, de las que 13 fueron agresiones físicas y 23 verbales.Desde el Gobierno andaluz se ha señalado que la Consejería de Salud cuenta con un plan específico para la prevención de estas situaciones y para actuar cuando se produce una. En materia de prevención, los centros sanitarios cuentan con diferentes medidas de seguridad, aparte de los guardias de seguridad, entre ellas un total de 226 cámaras, 23 GPS en ambulancias, un interfono; 238 salidas alternativas en consultas, un total de 165 aplicaciones antipánico instaladas, 537 timbres antipánico en consultas y 1.649 teléfonos para alertas.Además de estas medidas, también se realizan cursos y talleres de formación, para la gestión de situaciones de conflicto. No obstante, desde Salud apuntan que "las agresiones son situaciones muy excepcionales y puntuales, que apenas son representativas si tenemos en cuenta los millones de actos médicos que se llevan al año en la provincia entre consultas, operaciones, atenciones en urgencias, ingresos hospitalarios, pruebas diagnósticas, etc".