Cubrieron al menos durante 11 años con decenas de miles de euros las pérdidas de los proyectos periodísticos de Carlos Sosa, compañero de la juez y diputada de Podemos.
La operación es sencilla aunque complicada de entender desde la ortodoxia de la rentabilidad económica: ungrupo de empresarios grancanarios salvaron al menos durante once años, de 2000 a 2011, los ruinosos negocios informativos del periodista y director del diario digital Canarias Ahora, Carlos Sosa, pareja de la juez y ahora diputada de Podemos, Victoria Rosell. La financiación se producía mediante préstamos -algunos de hasta 70.000 euros, como los dados por el dueño de Seguridad Integral Canaria y presidente de la UD Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez– a empresas dirigidas o participadas por Sosa que se extinguían o dejaban sin actividad. Como los préstamos no se devolvían, el dinero se capitalizaba en acciones de las empresas nuevas que se constituían. Al final, en un trueque se saldaba la deuda histórica a través de publicidad en el periódico Canarias Ahora que dirige Carlos Sosa, compañero de Rosell, una de las magistradas más polémicas de Las Palmas de Gran Canaria por cuyo juzgado han pasado asuntos de gran notoriedad pública y trascendencia informativa.
De proceder todos los empresarios prestamistas como Ramírez el dinero que se daba a Sosa se llevaba a pérdidas, pero la deuda no se saldaba. Puede resultar extraña la generosa y extraordinaria financiación del grupo de empresarios grancanarios al marido de la juez Rosell pero Miguel Ángel Ramírez en una declaración ante el juez Salvador Alba y la fiscal Evangelina Ríos el 23 de marzo, donde desveló el entramado, lo explicó así: “Me dijeron: ¡hombre echa una mano aquí que estamos todos [los empresarios que financiaban la operación] empujando a ver si este medio [Canarias Ahora] sale”. La fiscal se quedó perpleja. Se perdía dinero en cada operación, pero los prestamistas seguían dando dinero a Sosa para cada nueva sociedad que se constituía.
Ramírez detalló ante el juez Alba sus negocios con el periodista Carlos Sosa. El magistrado, durante una declaración sorpresiva que duró casi una hora, le preguntó por varios préstamos concedidos entre 2000 y 2011, con los que Ramírez “ayudó” al periodista a mantener su medio de comunicación digital, así como por los vínculos comerciales que les unen. Estos préstamos convirtieron a Ramírez en ‘accionista virtual’ de Canarias Ahora, al igual que el resto de quienes financiaron al periodista.
La Fiscalía de Las Palmas ya investigó sin éxito la operación por la que Canarias Ahora alquiló la licencia de FM a la UD Las Palmas, objeto de una querella del ministro José Manuel Soria contra la juez en excedencia Victoria Rosell, que estuvo al frente de la investigación a Ramírez hasta que dejó el Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria para concurrir a las elecciones generales
Salvador Alba deberá abandonar el Juzgado en las próximos semanas, cuando el nombramiento de su nueva titular, Carla Vallejo, se publique en el BOE y deje Telde para trasladarse a la capital grancanaria. El magistrado, antes de retornar en exclusiva a su puesto en la Audiencia de Las Palmas, parece dispuesto a profundizar en la investigación por supuesto fraude fiscal a Seguridad Integral Canaria, una causa que heredó de su antecesora en el juzgado, Victoria Rosell. En los cuatro meses que lleva con el caso Alba ha elaborado un informe sobre el estado de ese procedimiento, fijado una fianza millonaria a la empresa e interrogado dos veces a Ramírez, dueño del Grupo Ralons y presidente de la UD Las Palmas.
La última, el 23 de marzo, a petición del magistrado instructor, para aclarar las relaciones empresariales y comerciales entre Ramírez y la pareja de Rosell. Esas relaciones, según el investigado, comenzaron en el año 2000, pero no son objeto de las diligencias previas abiertas, que empezó a tramitarlas Rosell a principios de 2014, tras admitir una querella de la Fiscalía por varios delitos contra la Hacienda Pública y la Seguridad Social.
Lo que se investiga en esa causa es si la empresa, entre 2008 y 2013, ha pagado a sus vigilantes de seguridad las horas extraordinarias camufladas en dietas, con el consiguiente ahorro de impuestos, un engaño que el empresario ha negado en las tres comparecencias judiciales (dos con Alba y una con Rosell, en el mes de abril de 2014). De ahí la sorpresa que ha causado el interés del instructor por los negocios de Ramírez con Sosa, tanto que la diputada de Podemos ha solicitado al Juzgado una copia de la declaración, algo igual de inusual porque la exjuez no es parte en ese procedimiento.
Alba interrogó a Ramírez por varias operaciones recogidas en la contabilidad de sus empresas, todas relacionadas con Canarias Ahora, Virtual Press y Clan de Medios de Comunicación, que son las sociedades empleadas por Sosa para gestionar su diario digital.
La deuda de Ramírez con Sosa quedó saldada en 2011 con diferentes acuerdos publicitarios, año en el que Ramírez cesó como administrador y apoderado general de Gestiones y Asesoramiento 3.000, la empresa con la que firmó los contratos de préstamos de dinero, compra de participaciones, asesoramiento y gestión. Al frente siguen dos primos del empresario, que tiene una participación testimonial, del 0,5 %. Ese y otros vínculos comerciales se detallan en el interrogatorio, en el que también participa la fiscal Evangelina Ríos.