El vigilante de seguridad de origen leonés, con permiso de armas como escolta privado, buscado como presunto autor del disparo a José Carlos C.G. fue quien reservó una habitación en el Hotel Carril, pues, de confirmarse que la reunión entre amos habría estado motivada por un asunto de drogas, no tendría sentido que un vecino carrilexo contratase una habitación a pocos metros de su casa con una identidad falsa. Carril es un pueblo pequeño y todos se conocen.
La Policía Nacional pudo constatar que la reserva se ejecutó con una documentación falsa. Al parecer, el leonés habría entregado una fotocopia de ese DNI falsificado al establecimiento, pero los agentes pudieron comprobar que no era la suya cuando hallaron en el cuarto en el que se produjo el tiroteo una cartera con la que presuntamente sería la documentación real del fugitivo. Tanto él como el coche en el que viajaba se encuentran en busca y captura.
La Policía Nacional estrecha el cerco para encontrarlos y ha dado aviso a todos los cuerpos de seguridad para que colaboren en la localización del joven leonés, pero anoche todavía no habían podido detenerlo.
Todos los hoteles están obligados a comunicar diariamente a la Policía la identidad de cada una de las personas que se encuentran alojadas en sus establecimientos para comprobar que todo está en orden. Por ahora no has trascendido qué ha ocurrido en el caso del Hotel Carril.