+El juez instructor considera que no cumplió con su labor al no impedir el botellón
+Emilio Monteagudo dimite tras su imputación en el caso Madrid Arena
+Imputa al promotor, Miguel Ángel Flores, y los médicos Carlos y Simón Viñals
+Cinco adolescentes murieron por una avalancha en uno de los vomitorios
El juez del caso Madrid Arena, Eduardo López-Palop, mantiene la imputación de dieciséis personas en la causa, entre ellos el organizador de la fiesta de Halloween que se celebró la madrugada del 1 de noviembre de 2012, Miguel Ángel Flores, y el jefe de la Policía Municipal de Madrid, Emilio Monteagudo, y considera que catorce de ellas deberían ser juzgadas por cinco supuestos delitos de homicidio imprudente y diez de lesiones.
Tras conocer su imputación, Monteagudo ha presentado su dimisión, que ha aceptado el delegado de Seguridad y Emergencias de Madrid, Enrique Núñez.
Como ya adelantó TVE, el juez imputa finalmente para que se sienten en el banquillo a dos personas más de las que pedía la Fiscalía, entre ellos Monteagudo, según el auto que pone fin a la instrucción, que se ha notificado este lunes a las partes.
En el caso concreto de la imputación del jefe de la Policía Municipal, el instructor ve una relación directa entre el botellón que se celebró en los alrededores del pabellón y la avalancha que se produjo dentro del recinto municipal.
Tras la investigación, concluye el juez que la Policía Municipal no cumplió con su labor ese 1 de noviembre, sino que "tuvo una actitud que benévolamente puede ser calificada de contemplativa", porque, en opinión del magistrado, el cuerpo dirigido por Emilio Monteagudo no impidió el multitudinario botellón que había alrededor del recinto y solo decidió desplazar a 12 agentes a la zona, cuando en otros eventos en el pabellón municipal ha llegado a haber más de 60, según los testimonios recogidos en el auto.
En el auto, fechado el pasado 29 de agosto, el magistrado concluye las pesquisas tras dos años de instrucción y da un plazo de un mes a las partes para la presentación de recursos y escritos de acusación antes de la celebración de la vista oral.
"Imprudencia grave profesional" de los médicos
Entre los imputados estaba ya el promotor de la macrofiesta del Madrid Arena, Miguel Ángel Flores, que ha depositado 300.000 euros de fianza para evitar su ingreso en prisión. Llegó a vender 23.000 entradas cuando el aforo máximo permitido era de 10.620 y ocultó parte de las urnas con los tickets vendidos.
De la empresa organizadora de la macrofiesta, Diviertt, también están imputados el director general, Santiago Rojo, y Miguel Ángel Morcillo, maitre de evento, que además revisó las taquillas.
Igualmente, ya estaban imputados los dos médicos que atendieron a las víctimas, Carlos y Simón Viñals, encargados de enfermería, que no contaba con medios suficientes para atender posibles emergencias. A los dos se les atribuye tres delitos por imprudencia grave profesional, en el caso de las jóvenes Rocío Oña, Cristina Arce y Katia Esteban.
Imputados responsables municipales y de la seguridad del evento
También serán llamados al banquillo cuatro responsables de la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos, que explotaba el Madrid Arena, por no haberse ocupado de la seguridad del edificio: el director del Departamento de Seguridad, Rafael Pastor Martín; el coordinador de proyectos, Francisco del Amo; el técnico de operaciones y jefe de Emergencias del evento, José Ruiz Ayuso; y el coordinador Jefe del Departamento de Seguridad, José Luis Rodríguez Caamaño.
Además, se procesará a los responsables de Seguriber en la noche del evento, Juan José Paris y Raúl Monterde, coordinadores de la seguridad exterior, así como al jefe del equipo de Seguriber José Antonio Díaz Romero y al vigilante de seguridad Roberto Mateos.
De la empresa Kontrol 34, que también participó en la seguridad interior de la fiesta, el juez imputa a sus socios, Carlos Manzanares y Emilio Billiard, a los que considera responsables de no dar ninguna indicación de seguridad a sus trabajadores en la noche de la tragedia.
Cinco chicas murieron en la fiesta de Halloween de 2012
Con este auto, el juez Palop da carpetazo a la investigación abierta la madrugada del 1 de noviembre de 2012 tras la muerte de cinco chicas por la fatal avalancha que se produjo en el interior de unos de los vomitorios del pabellón debido al exceso de aforo, cuyo número se triplicó hasta los 22.000.
Finalmente, ha retirado la acusación sobre ocho imputados, entre ellos la de los delegados Antonio de Guindos y Fátima Núñez; y la del director general de Emergencias y Protección Civil, Alfonso del Alamo.