El viajero sufría malestar, vómitos y mareo y ha estado en varios países africanos
Los equipos del Samur con los trajes NBQ en la estación. E. M.
El viajero brasileño que llegó anoche a la estación de autobuses madrileña de Méndez Álvaro y fue hospitalizado ante el temor a que pudiera tener ébola no padece la enfermedad, según han informado a Europa Press fuentes de la Consejería de Sanidad.
Todas las alarmas saltaron hacia las 00.30 horas de la madrugada, cuando el potencial enfermo, un ciudadano brasileño que presentaba una dolencia desconocida y se encontraba bastante mal, llegó a la Estación Sur de Autobuses de la capital. En su pasaporte figuraban datos de que había estado recientemente en varios países africanos y su repentino malestar, vómitos y mareo, provocó que se activaran los protocolos sanitarios.
Fueron dos vigilantes de seguridad los que trasladaron al paciente hasta las dependencias del Cuerpo Nacional de Policía en la Estación Sur de Méndez Álvaro.
Acto seguido, varias dotaciones del Samur con trajes NBQ atendieron al pasajero y lo trasladaron urgentemente a la Fundación Jiménez Díaz para hacerle pruebas y descubrir qué enfermedad padecía.
La Policía Nacional acordonó una zona de la estación y cinco de sus agentes, junto a los dos vigilantes de seguridad fueron atendidos porque habían tenido contacto con el enfermo. Fueron trasladados finalmente hasta las dependencias del Samur en la Casa de Campo para ser desinfectados.
El paciente, de unos 30 años, pese a que había viajado recientemente por África, no ha estado en ninguno de los países más afectados por la epidemia:Liberia, Sierra Leona y Guinea Conakry.
El Procedimiento de Actuación frente a casos sospechosos de enfermedad por virus de Ébola (EVE) fija el aislamiento estricto del paciente durante el transporte y hospitalización, y su traslado a una unidad de enfermedades infecciosas de alta seguridad. Establece además su ingreso en una habitación individual con acceso restringido al personal esencial para su atención y cuidado, la utilización de instrumental médico de uso exclusivo (o la esterilización si es reutilizable) y la inmediata desinfección de cualquier instrumental utilizado por el paciente. Dicho procedimiento incluye también otras medidas de protección para las personas que hayan estado en contacto con el paciente.