Es vergonzoso que a día de hoy (19 de septiembre de 2017) continúen sin cobrar muchos de sus trabajadores.
Para cuando los trabajadores perciban sus salarios, una parte importante se irá en pagar intereses en sus bancos, (hipotecas, préstamos, recibos varios).
Los hijos de estos vigilantes no tienen libros con los que asistir al inicio del curso, ya que aun no los han podido pagar.
Una autentica vergüenza.
¿Van a hacer algo los organismos públicos y los políticos al frente de los mismos? O ¿seguirán permitiendo este atropello a los trabajadores y sus familias?
Estos políticos se retratan a diario, cuando una ley que fomenta la proliferación de empresas pirata y que empobrece a los trabajadores, se demuestra injusta, se cambia y listo ¿no?