Los delincuentes se descolgaron por el techo con una especie de cuerda de tela de saco
ANTONIO HERRERO
SANTA CRUZ DE TENERIFE Un espectacular robo tuvo lugar en la madrugada de ayer en la joyería Oromax, sita en la galería del centro comercial Alcampo de La Laguna. Los autores del asalto consiguieron apoderarse de relojes, anillos, gargantillas, cadenas y otros efectos por valor de 200.000 euros, según confirmaron a la opinión de tenerife fuentes policiales cercanas a este suceso.
El golpe ocurrió después de la una, aproximadamente, cuando saltó la alarma por primera vez. El servicio de vigilancia que presta la empresa Seguridad Integral Canaria acudió a la joyería, pero los guardias no observaron nada anómalo. Lo que no sabían era que en esos momentos los delincuentes se encontraban escondidos en su interior y preparados para llevarse el botín: la nada despreciable cantidad de 200.000 euros, según denunció su propietario, Máximo Correa, ante la Policía Nacional de la Comisaría de La Laguna.
Veinte minutos después la alarma volvía a saltar de nuevo y los vigilantes de Seguridad Integral Canaria acudieron al establecimiento. Lo que se encontraron fue una especie de cuerda de tela de saco que colgaba del techo, el lugar por donde entraron y salieron los delincuentes, así como numerosas bandejas de alhajas desvalijadas y diversos útiles y herramientas que emplearon para este audaz asalto. Se trataba de cizallas, destornilladores, alicates y otros elementos que fueron recogidos por el Grupo de Policía Científica de la Comisaría de La Laguna, que fue el que practicó la inspección ocular.
Este diario trató a lo largo de la tarde de ayer de hablar con el propietario del establecimiento asaltado, pero declinó hacerlo. Se da la circunstancia de que esta persona es propietaria de otra joyería, Vital Joya, en la misma galería del Centro Comercial Alcampo. Ante la negativa del joyero, también se trató de contrastar la información con el responsable de Alcampo, así como con el jefe de seguridad de la empresa que presta protección y vigilancia, pero el primero no quiso pronunciarse y el segundo manifestó que tenía prohibido hablar de cualquier asunto que tuviese relación con lo ocurrido. Ayer, la joyería estaba cerrada y tenía un cartel en el que advertía que no abriría hasta el viernes por inventario.
Esta es la primera vez en todos los años que lleva funcionando el centro comercial Alcampo en La Laguna en que tiene lugar un robo de estas características. Hace unos tres años el Mac Donald´s, en el exterior del establecimiento, de este centro sufrió un robo por el procedimiento del butrón.
Este es el tercer robo a joyerías sin esclarecer en Tenerife en el que los autores consiguen un sustancioso botín. Los otros dos ocurrieron en octubre en Granadilla de Abona, donde se apoderaron de unos 100.000 euros en joyas, y en diciembre en San Miguel de Abona, donde los delincuentes robaron alhajas que la víctima valoró en 300.000 euros, aunque la Policía cree que no fue tanto.