La fiscal cuenta con testimonios que avalan que la compra de la emisora se negoció mientras la juez aún estaba al frente del juzgado
La fiscal sigue acumulando material. Ahora, un testigo ha avalado que la pareja de la candidata de Podemos Victoria Rosell negoció un contrato de 300.000 euros con el presidente de la UD Las Palmas mientras éste estaba siendo investigado por el juzgado de ella.
La fiscal Evangelina Ríos, encargada de Delitos Económicos en Gran Canaria, ha estado recabando toda la información sobre la venta de la emisora de radio propiedad del compañero sentimental de Victoria Rosell al empresario Miguel Ángel Ramírez, presidente de la UD Las Palmas.
Y cuenta con testimonios que avalan que esa compra se negoció mientras la juez aún estaba al frente del juzgado. Esto es, cuando aún no había pedido la excedencia para pasarse a la política y seguía investigando a quien finalmente adquirió la emisora de su pareja.
Entre esas declaraciones figura la de Fernando Ortega, director de Todoradio, a quien Carlos Sosa, compañero de Rosell, le tenía arrendada su emisora. De su declaración se desprende que Sosa interfiere en las negociaciones previas que ya tenía abiertas Ortega con Ramírez.
Según consta en la declaración, Fernando Ortega y Carlos Sosa eran antiguos compañeros, ya que el primero era el jefe de administración de Canarias Ahora Radio, la emisora inmersa en el conflicto. Ortega llegó a un acuerdo con Carlos Sosa por el que éste le cedía la frecuencia de Canarias Ahora Radio por un periodo de 10 años y 60.000 euros. Fernando Ortega entró en negociaciones con UD Radio (la emisora de la UD Las Palmas) antes de este verano para cederle la frecuencia citada o llegar a un acuerdo de explotación conjunta de la misma.
Esta operación está enmarcada en la decisión del Gobierno de Canarias de retirar la licencia a la emisora que hasta ese momento explotaba el club presidido por Miguel Ángel Ramírez.
El 6 octubre, Fernando Ortega y UD Radio llegaron a un acuerdo para la explotación conjunta de la frecuencia. Según el testimonio de este testigo, fue entonces cuando Carlos Sosa maniobró para arrebatarle la operación. Entendió Sosa que era mejor concretar directamente él el negocio. En ese momento, su pareja, la juez Rosell, aún dirigía las investigaciones por un fraude fiscal millonario a Miguel Ángel Ramírez.
Sosa le cuenta a Ortega, el 14 de octubre, que ya había cerrado un acuerdo con Miguel Ángel Ramírez por un importe de 300.000 euros. Sosa insta entonces a Fernando Ortega (Todoradio) a abandonar la frecuencia, a pesar del contrato existente entre las partes. Le apunta que, si no lo hace, recurrirá a los tribunales. Cuando se produce esa tensa situación, Rosell seguía ejerciendo de magistratura en Las Palmas, donde habría tenido que resolverse un posible pleito entre Sosa y Ortega.
No fue sin embargo hasta el 22 de octubre cuando Rosell recibió la excedencia de la carrera judicial para dedicarse a la política como candidata número uno por Las Palmas.
El 28 de octubre se firmó definitivamente el contrato entre Carlos Sosa y Ramírez (UD Radio), aunque el acuerdo estaba ya cerrado desde, al menos, el día 14.
Ese mismo 28 de octubre, Carlos Sosa recibió 101.500 euros mediante transferencia bancaria desde una cuenta de Miguel Ángel Ramírez a nombre de la empresa Clan de Medios, propiedad de Carlos Sosa, en concepto de adelanto por el arrendamiento de la frecuencia. El resto del dinero hasta la cantidad acordada se pagaría en cuotas mensuales hasta el final del contrato.
El 30 de octubre, Carlos Sosa realizó una transferencia a Fernando Ortega (Todoradio) de 40.000 euros en concepto de indemnización por la rescisión del contrato.