Ha sido suspendido a petición del Ministerio Fiscal ante la falta de testigos y pruebas fundamentales, como es el vídeo de la grabación de ese día. Los hechos se produjeron el 23 de octubre de 2014 cuando la acusada habría entrado hasta seis veces en el centro comercial cambiándose de ropa y de peinado sustrayendo objetos por valor de 1.266 euros. La pena que se solicita es de doce meses de prisión, así como la prohibición de la entrada en cualquiera de estos centros comerciales. Además, se pide una indemnización por el valor que tienen los objetos presuntamente sustraidos como son dos pares de zapatos de Ralph Lauren, tres frascos de perfume de Paco Rabanne y dos plumíferos y bolsos de Adolfo Domínguez.
El juzgado de lo Penal número dos de Salamanca ha acogido en la mañana del jueves un juicio contra una mujer, C.A.F.O., por un presunto robo que se produjo el 23 de octubre de 2014 en un conocido centro comercial hasta en seis ocasiones diferentes. Para ello, según lo testificado por un vigilante de seguridad, se habría cambiado de ropa y de peinado en todas las veces que entró y salió para no ser reconocida.
La vista, sin embargo, se ha suspendido después de la testificación del vigilante ante la ausencia de la propia acusada y de algún representante policial, Cuerpo que fue el que un día después la detuvo en Valladolid, reconociéndola como autora de los hechos cometidos también en Salamanca a través de los vídeos aportados por el centro comercial. La suspensión del juicio, pedida por el Ministerio Fiscal, también viene dada por dichos vídeos, no presentes en el auto, y que ahora deberán pedir a la Policía Judicial para esclarecer el suceso.
La pena que se solicita es de doce meses de prisión, así como la prohibición de la entrada en cualquiera de estos centros comerciales. Además, se piden 1.266 euros de indemnización, valor que tienen los objetos presuntamente sustraidos como son dos pares de zapatos de Ralph Lauren, tres frascos de perfume de Paco Rabanne y dos plumíferos y bolsos de Adolfo Domínguez.
Antes de la suspensión, el único testigo que ha declarado afirmó que en las cámaras de seguridad se veía perfectamente que la misma persona se cambiaba de ropa y peinado para entrar al centro comercial con bolsas vacías. Tras su paso por el centro comercial habría llenado las bolsas con esos objetos, hecho este que no recogen las cámaras. Sí lo hacen, sin embargo, en su paso por la tienda en la que se, por ejemplo, según la declaración, se agachó en la zona de perfumes, faltando posteriormente tres.
