7 de diciembre de 2012

ESABE. Una concesionaria municipal acumula impagos a más de 120 empleados


Todo comenzó con la denuncia de los vigilantes del Museo de Belas Artes, que revelaba que la empresa Esabe Vigilancia SA, concesionaria del servicio de seguridad del edificio, llevaba seis meses sin pagarles. Una situación que no solo se remitía a la pinacoteca coruñesa, sino a otras instalaciones públicas e, incluso, firmas privadas para las que trabajaba Esabe.
En A Coruña, la empresa ha prestado sus servicios en Correos, la estación de autobuses, la biblioteca González Garcés y la compañía de telermárketing Stream. Pero su radio de acción se extiende más allá de la capital herculina, ya que cuenta con contratos en todas las delegaciones gallegas de Correos, el Museo de Pobo Galego de Santiago y otras tantas empresas privadas. Y en todas ellas se repite la misma situación que en A Coruña: los empleados llevan varios meses sin percibir sus salarios.
En la Unión Sindical Obrera (USO) señalan que en Galicia puede haber más de 200 personas afectadas por los impagos de Esabe, 120 de ellas en la provincia de A Coruña. "La mayor parte de la gente lleva unos cinco meses sin cobrar, aunque está el caso flagrante de la estación de autobuses, donde se les deben casi nueve meses", explica Alfonso Ares, responsable del sector de la seguridad en USO.
La organización sindical ya ha interpuesto una denuncia por vía penal contra la empresa en Lugo, que se une a las decenas de demandas particulares que acumula en los juzgados de A Coruña. Concretamente, el juzgado número 4 de lo social acogerá varias vistas orales contra los responsables de la compañía en las próximas semanas.
responsable subsidiario
Los continuos impagos de Esabe han propiciado el cambio de la concesión en centros coruñeses, pero esto no remedia la situación de los trabajadores afectados, dado que las nuevas concesionarias se niegan a abonar los salarios atrasados. Por ello, se están planteando demandar al Ayuntamiento en calidad de responsable civil subsidiario.
"Puede que el Ayuntamiento haya pagado a la empresa en tiempo y forma, pero es el que contrata y tiene que vigilar si la concesionaria cumple las condiciones", apuntan desde USO.