Después de colgar mí último articulo, seguí investigando por la red sobre el tema de la protección individual, ya que la curiosidad es mucha, y me pregunte en que debería de fijarme a la hora de comprar un chaleco de protección balística.
Lo primero que quiero decir es que hay dos tipos de protección, una “blanda” y otra “dura”, en función del nivel de protección que deseemos. Para no ser muy técnico diré que la blanda seria para protegernos de cartuchos de pistolas y escopetas, y la dura para cartuchos de fusiles de guerra.
¿Qué nivel balístico es aceptable?
Por lo que he leído, el mínimo que debiéramos exigir como protección seria un nivel 3A (normativa NIJ), HG2 (normativa PSDB) y SK1 (normativa German Standard),
normativa NIJ Y SK (German Standard)
¿Un chaleco de protección balística, lo es también anticuchillo y/o antipunzón?
Pues eso depende de la normativa que afecte a la construcción de dicha protección. La normativa estadounidense NIJ solo considera la protección antipunzón, no anticuchillo, ya que en ese país los policías pueden usar su arma ante una agresión con un cuchillo y no contra un punzón, sin embargo normativas como la inglesa PSBD y la alemana German Standard si contemplan los dos tipos de protección. De hecho la normativa inglesa es la que se utiliza como referencia en Europa por lo que he leído para certificar las propiedades anticuchillo/antipunzón, siendo lo ideal un nivel KR2.
Placas balísticas
Se usan para niveles de protección altos, para protección ante cartuchos militares, y aquí hay que andarse con cuidado a la hora de escoger la placa, ya que hay dos tipos, las que se usan solas, y las que usan combinándolas con la protección blanda. Es importante estar seguros de que tipo de placa usamos, ya que si escogemos una placa para uso combinado con protección blanda, y la usamos sola, nos llevaremos una sorpresa desagradable el día que la pongamos a prueba.
Mi concepto ideal a la hora de trabajar en seguridad privada.
Por la variedad de servicios que se dan en seguridad privada, necesitaríamos una protección que sirva para usar tanto en el interior como en el exterior del uniforme, y que nos permita realizar las combinaciones que necesitemos en función del servicio que realicemos, sin tener que tener que comprar mas de un chaleco para ello, siendo ideal poder contar con:
- Un panel de protección balística blanda.
- Un panel de protección anticuchillo/antipunzón, en caso de que la protección balística no nos satisfaga esta necesidad.
- Placas antitrauma (alguna de ellas también tienen protección balística).
- Placas balísticas “duras” para protegernos ante cartuchería de guerra (sobre todo para trabajar en blindados, ya que últimamente se han dado asaltos en los que se han usado fusiles kaláshnikov).
- Un funda exterior para poder usar con las placas balísticas duras (por ejemplo, para trabajar en blindados), ya que no habría posibilidad de usarlas bajo la ropa por lo voluminosas que resultan.
- Una funda interior para cuando solo necesitemos la protección blanda y por requerimientos del servicio no podamos llevar a la vista el chaleco blindado.
Los datos que deben de aparecer en el paquete balístico (panel), para que estemos seguros de que compramos un producto de calidad y nos de la tranquilidad necesaria a la hora de usarlo son:
- Quien lo fabrica y cuales son sus señas, bien claro.
- Nivel de protección y normativa, sin que lugar a ninguna duda sobre sus propiedade balísticas, anticuchillo y antipunzón.
- Fecha de fabricación: con que ponga el año basta, podremos comprar un chaleco que tenga hasta un año de antigüedad si ha estado bien almacenado.
- Garantía: entre 5 y 10 años, y esta tiene que ser siempre menor que la fecha de caducidad.
- Numero de serie y lote de fabricación: denota seguimiento y control del fabricante, lo cual redunda en que confiemos más en el paquete balistico.
- Cara del cuerpo: en algunos chalecos se indican la cara de la agresión y la cara del cuerpo, para una colocación correcta.
- Instrucciones de uso y mantenimiento.
A la hora de escoger un chaleco, deberíamos fijarnos en lo siguiente:
- Mirar que las certificaciones no están manipuladas, en caso de duda, consultar con el laboratorio.
- Que la funda del paquete balístico, debe ser impermeable y estar sellada, no es aconsejable aquellas que usan fundas de goretex ya que al transpirar, dañan las fibras que nos dan protección.
- Que la distribución y grosor del paquete balístico debe ser uniforme.
- El panel delantero tiene que montar sobre el trasero, para evitar penetraciones frontales.
- Escoger una talla adecuada a nuestra complexión, en caso de no encontrarla, es aconsejable hacerse uno a medida (aunque sea más caro).
- La funda de los paneles debe estar perfectamente alojada, sin movimientos interiores, tiene que tener de cuatro a seis puntos de anclaje, en los hombros y laterales.
- El material exterior del paquete balístico será de Akwadyne, Coolmax o similar, para que extraiga el sudor de la piel.
Deberemos rechazar cualquier chaleco que nos ofrezcan si:
- La etiqueta del paquete balístico no indica el nivel de protección.
- El proveedor no facilita los certificados del nivel de protección.
- El proveedor no detalla el nivel de protección en la factura.
- La envuelta del paquete balístico está cosida.
- La etiqueta del paquete balístico no contiene toda la información o no indica la garantía.
- En la protección lateral, el panel delantero no monta sobre el trasero.
Reconozco que para un amateur en la materia es complicado entender todo este lenguaje técnico, aunque viendo el lado positivo, a base de trastear y pelearse en la red en busca de información he aprendido un montón sobre el tema, cosa la cual expongo aquí para que si alguien esta buscando información sobre el tema, esto le pueda ayudar, aunque sea solo un poco.