La dirección del centro denunció los hechos al echar en falta las pertenencias en el depósito
Dos varones, uno de ellos vigilante de seguridad del Instituto Anatómico Forense y el otro, un receptador, fueron detenidos por la Policía Nacional de La Laguna, en Tenerife, como autor, el primero de varias sustracciones realizadas mientras desempañaba su trabajo en el Instituto de Medicina Legal y el segundo por comprar dichas piezas a sabiendas de su ilícita procedencia
El detenido, identificado como C. J. B. T., natural de Venezuela, que tenía la responsabilidad de velar por la seguridad del centro y las pertenencias de las personas que ingresaban cadáver en la institución para ser examinadas por el forense, se aprovechaba de esta circunstancia para retirar del depósito de efectos joyas y dinero de los fallecidos, lucrándose igualmente con la venta.
La investigación, que se desarrolló durante el transcurso de varios meses, se inició por la denuncia ante el juzgado por parte del responsable de la institución afectada en relación a que habían detectado la desaparición de ciertos efectos de valor y dinero con los que habían llegado las personas fallecidas al centro y que habían sido reclamados por sus familiares o por los juzgados al servir como prueba de convicción. Una vez se desarrolló la investigación, los agentes llegaron a la conclusión de que el autor tenía que trabajar en el Instituto, ya que además de sustraer efectos y dinero, falseaba los registros donde figuraba el detalle para evitar ser descubierto.
La investigación demostró que el acusado era el autor de los hechos denunciados, por lo que se procedió a su detención inmediata. El detenido confesó todos los hechos en presencia de su abogado al tiempo que identificó a otro hombre, de 40 años y natural de La Laguna, J. A. S. C., como la persona a la cual vendió las joyas sustraídas, por lo que también fue detenida.
El juzgado decretó la libertad con cargos.