14 de octubre de 2015

Profesionales de seguridad privada participan en una jornada de formación en el uso de la fuerza

Durante la mañana del pasado sábado, alrededor de 40 profesionales de la seguridad privada, han participado en la celebración de la I Jornada formativa sobre el uso de fuerza para profesionales de la seguridad, un evento organizado por el Centro de Formación ‘Forsepriv’, en Polideportivo Municipal Príncipe Felipe de Ciudad Real.
jornada seguridad privadaEl objeto de este evento no era otro que el de dar a conocer a vigilantes de seguridad los protocolos de intervención operativaen los que como último recurso sólo cabe el uso de la fuerza física para el cumplimiento de sus objetivos profesionales.
Para la celebración de este evento se ha contado con el profesorado del Instituto Europeo de Intervención Operativa Policial, que durante tres horas de entrenamiento profesional se
encargó de dejar claro a los asistentes que “no vale cualquier cosa para resolver las situaciones de conflicto en las que pueden verse envueltos”. Pues las actuaciones de estos profesionales se hallan enmarcadas dentro del ámbito de la Ley 5/2014, de 4 de abril, de seguridad privada, donde se establece que deben actuar bajo los principios de oportunidad, congruencia y proporcionalidad, ocasionando la menor lesividad.
Antes del inicio de la sesión práctica, el profesorado dejó claro que la principal herramienta con la que van a contar para la resolución de los conflictos que puedan generarse en el cumplimiento de sus funciones es la palabra. “Es importante conseguir que la persona haga lo que el profesional le pide, porque ella quiere hacerlo sin necesidad de forzarle”, aseguran desde la organización que remarca que la importancia de formarse en ‘Métodos de comunicación estratégica, defensa verbal y persuasión’, un curso de 20 horas de formación para que el profesional pueda cumplir sus objetivos a través del uso de la palabra.
Se ha incidido igualmente en la importancia de la imagen profesional, debiendo cuidar todos los detalles en cuanto a la forma en que se muestran ante la ciudadanía, ya que si esta no es correcta, obtendrán un efecto negativo.
La parte de formación práctica ha estado orientada principalmente hacia la autoprotección para minimizar los riesgos que pudieran tenerse ante un acometimiento físico, profundizando, posteriormente en  el uso de las herramientas con las que el Estado les dota, teniendo en cuenta que su uso debe hacerse causando la menor lesividad para velar por la integridad física de las personas.