Las imágenes muestran que la vestimenta de Santiago Rojo coincide con la de la persona que ordena abrir el portón del recinto a las personas que hacían botellón.
Los responsables de la empresa Madridec y los socios de Diviertt se enzarzaron este jueves en un cruce de acusaciones por la responsabilidad de la seguridad.
«Oí a Del Amo decir que iba abrir el portón. No le oí más detalles», explicó Rojo, mientras que el empleado de Madridec negó estos hechos.
Los responsables de la empresa municipal Madridec y los socios de la promotora Diviertt se enzarzaron este jueves en un cruce de acusaciones por la responsabilidad de la seguridad interior del Madrid Arena.
En la tercera sesión del juicio por la tragedia del Madrid Arena declararon el director general y número 2 de Diviertt (empresa organizadora del evento propiedad de Miguel Ángel Flores, principal acusado), Santiago Rojo, el jefe de personal y número 3 de la promotora, Miguel Ángel Morcillo, y Francisco del Amo, que era coordinador de proyectos del departamento de operaciones de Madrid Espacios y Congresos (Madridec), la empresa municipal gestora del recinto.
Los tres procesados que declararon tan solo coincidieron en reconocer que no hubo una reunión con Seguriber ni con la Policía Municipal para tratar sobre la seguridad Todos ellos negaron dar la orden de abrir el portón por el que se colaron 3.000 personas que hacían botellón fuera del recinto, lo que provocó, junto al exceso de aforo (se vendieron 22.800 entradas mientras que el máximo permitido era de 10.620, según el fiscal), una avalancha que acabó con la muerte de cinco jóvenes el 1 de noviembre de 2012.