13 de febrero de 2014

Despido objetivo: El FOGASA ya no pagará su parte

FOGASA
Despido objetivo: El FOGASA ya no pagará su parte debido a la supresión del artículo 33.8 del Estatuto de los Trabajadores introducida por la Ley 22/2013, de 23 de diciembre de 2013, de Presupuestos Generales del Estado para el año 2014 en su disposición final quinta.

Según dicho artículo suprimido, cuando se producía la extinción del contrato de trabajo indefinido por causas objetivas o por un procedimiento concursal, siempre que se produjeran estos hechos en una empresa de menos de 25 trabajadores, el FOGASA se hacía cargo de pagar 8 días de indemnización por cada año trabajado, prorrateándose por meses los períodos de tiempo inferiores al año. Las empresas se encargaban de pagar los otros doce días por año trabajado. Esto suponía una gran ayuda a las pequeñas empresas que se encontraban con esa colaboración cuando se veían obligadas a despedir e indemnizar con la cantidad correspondiente a algunos de sus trabajadores. Para los mismos también suponía una cierta tranquilidad ya que se aseguraban cobrar una parte de la indemnización.
Con la eliminación de la colaboración del FOGASA en el pago, serán las empresas las que tengan que soportar la cantidad total. Muchas de las mismas probablemente tengan más dificultades para poder afrontar el pago y su continuidad se verá seriamente comprometida. Del mismo modo, los trabajadores se verán perjudicados, ya que se verán obligados en muchas ocasiones a denunciar para poder cobrar el finiquito que les corresponde con los amplios plazos que eso supone.
El FOGASA pasará por tanto a actuar sólo en caso de insolvencia del empresario. El hecho de que las funciones del organismo se vean reducidas y que por tanto sus gastos sean menores, no va a suponer que se reduzca la parte de la cuota que se paga a Seguridad Social y que va dirigida al FOGASA.
También es de destacar la forma en la que se introduce este cambio importante en la legislación, a través de una disposición final en los Presupuestos Generales del Estado, sin avisar ni establecer algún tipo de diálogo con sindicatos y empresarios. Seguimos con los cambios continuos en la legislación laboral y esta vez le ha tocado al despido objetivo y su indemnización correspondiente de la que el FOGASA ya no se hará cargo en parte. La incertidumbre no crea un clima favorable para la economía.