Ocurrió en la estación de Polvoranca de la línea 5 tras entrar un grupo y «armar un follón». El dueño del arma está detenido mientras se esclarece el caso
La Policía Nacional investiga las causas por las que un joven de origen ucraniano resultó ayer herido de bala cuando se encontraba con unos amigos en un tren de Cercanías en la estación de Parque Polvoranca. El propietario del arma, un vigilante de seguridad, fue arrestado anoche, mientras se aclara el suceso.
El lesionado, de 18 años y origen ucraniano, fue alcanzado de un tiro en el muslo. Fue trasladado por sanitarios del Summa hasta el 12 de Octubre y está en estado grave si bien su vida no corre peligro.
Los hechos se produjeron sobre las siete y diez de la tarde en la línea C5 de la red de Cercanías de Renfe. Fue entonces cuando un grupo variopinto, integrado por seis chavales de distintas nacionalidades —españoles, suramericanos y del Este de Europa— se subió al tren en la estación de Parque Polvoranca.
Su intención no era otra que armar jaleo y provocar alguna bronca, como evidenciaban sus gritos, sus modales y su forma descarada de hablar y de mirar a los viajeros. No se sabe aún si algún pasajero se quejó de todo lo que estaba aconteciendo o se percataron los vigilante de seguridad.
Lo cierto es que uno de ellos acudió hasta el convoy en el que se encontraban los chavales, que hicieron caso omiso de sus palabras, por lo que se desató una discusión entre ellos.
Durante la refriega que mantuvieron, una bala salió del arma reglamentaria del vigilante de seguridad — revólver—, alcanzando de lleno al joven de origen ucraniano perteneciente al grupo alborotador. En ese momento se acabó la refriega y todo el mundo enmudeció.
Cuatro chicos de este grupo, incluido el herido, fueron identificados, y trasladados hasta la comisaría de Leganés en donde prestaron declaración. Mientras, los otros dos menores, quedaron a la espera de sus padres.
Distintas versiones
La confusión reina en cuanto a este episodio ya que, mientras los compañeros del vigilante de seguridad aseguraban que le arrebataron el arma, los chavales que provocaron el lío aseguran que fue él quien disparó. Fue detenido por ser el dueño del arma, a la espera del visionado de las cámaras que le serán solicitadas a Renfe. Él también tuvo que ser atendido de algunas lesiones que sufrió durante la trifulca.
Los agentes de la Policía Nacional tratan ahora de determinar las circunstancias en las que se produjeron los hechos con el fin de aclarar si el arma se disparó accidentalmente durante el forcejeo o si se hizo con intención y quién lo hizo.