17 de enero de 2016

El Principado emplaza a los vigilantes de Sograndio a acudir a la Fiscalía en lugar de hacer acusaciones infundadas

El consejero de Presidencia y Participación Ciudadana, Guillermo Martínez, ha emplazado este miércoles a los vigilantes de seguridad del centro de menores de Sograndio a acudir a la Fiscalía en lugar de seguir haciendo acusaciones "infundadas".
Así lo ha dicho en rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno, incidiendo en que se lleva tiempo trasladando a la sociedad informaciones "graves y falsas" sobre la situación en Sograndio.
El consejero ha rehusado entrar al detalle de los hechos ocurridos a principios de años en el centro por "el carácter reservado de los asuntos relativos a la justicia del menor", pero matizando que no hubo riesgo en la seguridad para los menores internos ni para los trabajadores, negando que hubiera habido una educadora auxiliar retenida.
Asimismo, aseguró que las decisiones adoptadas sobre los cinco menores implicados en el incidente "se tomaron de acuerdo a la normativa interna del centro", argumentando que si dos de ellos volvieron a habitaciones de aislamiento es porque de nuevo incumplieron las normas tras la sanción anterior.
El consejero, que hizo hincapié en la existencia de 34 protocolos de intervención en el centro así como en la comunicación constante con la Fiscalía, el Defensor del Menor y el Defensor del Pueblo, remarcó que Sograndio no es sólo un centro de internamiento sino que también ofrece actividades formativas y atención médica y psicológica.
Por ello, insiste en que si la asociación de vigilantes 'Avispa' cree que "hay descontrol y riesgos" tanto para los menores como para los empleados "debe poner los hechos en manos de la Fiscalía, el Defensor del Menor y el Defensor del Pueblo".
Con todo, además de defender el protocolo de acceso al armero o la gestión frente a acusaciones sobre vulneración de intimidad de los menores por la colocación de cámaras --con el conocimiento del Defensor del Pueblo y la Fiscalía--, Guillermo Martínez incidió en que, lejos de haber falta de personal, actualmente hay 35 vigilantes y 3 auxiliares junto con 23 educadores y 6 auxiliares para 35 internos.