Los agentes de seguridad privada de la urbanización Las Nieves de Montelar de Galápagos (Guadalajara), donde vivía la pareja -la mujer de 33 años que ha fallecido y el hombre que ha sido detenido por ser el presunto autor de su muerte- han sido quienes alertaban del asesinato ocurrido.
Según han confirmado familiares del presunto asesino, la pareja tenía una niña de cinco años que ahora se encuentra con sus abuelos, y que de confirmarse que ha sido un caso de violencia machista se computaría también como víctima, al haber quedado huérfana.
Además, varios vecinos de la urbanización, que no han querido desvelar su identidad, han relatado a Efe que han sido los dos guardias de seguridad privada que se encargan de vigilar la urbanización quienes, haciendo una de las rondas nocturnas, han descubierto al hombre visiblemente alterado en el medio de la calle y quienes alertaron del suceso al 112, sobre las 4.00 horas.
Los dos agentes de seguridad privada redujeron en un primer momento al presunto agresor y lo retuvieron hasta que llegó la Guardia Civil, que arrestó al hombre.
Estos mismos vecinos han asegurado no haber oído ruidos durante la noche y han afirmado que han conocido los hechos al inicio del día.
La familia, según han indicado los vecinos, llevaba unos dos años viviendo en esta urbanización de Galápagos, que se encuentra alejada del núcleo urbano, y era natural de la zona de Serracines (Madrid), en cuyo Ayuntamiento trabaja el presunto agresor.
De hecho, fuentes consultadas por Efe han indicado que la familia no estaba empadronada en Galápagos (Guadalajara).