El millonario tendría entre un 2% y un 3% de la compañía, según aseguran fuentes de mercado con sede en la city británica. Prosegur colocó un 4% del capital que tenía en autocartera, a través de JB Capital Markets, el pasado 10 de enero.
Bill Gates, fundador de Microsoft y considerado uno de los hombres más ricos del mundo, ha realizado otra inversión relevante en España: Prosegur, compañía en la que ha entrado el pasado mes de enero a través de su fondo Cascade Investment, comprando una gran parte de la autocartera de la empresa de seguridad.
El pasado 10 de enero, la compañía que preside Helena Revoredocolocó, a través del bróker JB Capital Markets (es decir, Javier Botín Capital Markets) un 4% del capital que tenía en propiedad, en una operación valorada en 123,2 millones de euros. Todavía mantiene un 3,047% que quiere mantener, salvo que de repente surjan otras opciones.
La propia JB explicaba que el deal se había realizado entre “un limitado y reducido grupo de inversores institucionales”. Fuentes con sede en Londres muy bien informadas afirman que ese reducido grupo lo forma prácticamente en exclusiva el vehículo de inversión de Gates, que habría tomado entre un 2% y un 3% de la compañía, siempre por debajo del umbral de notificación al regulador; al menos de momento.
Desde Prosegur afirman que nunca hacen declaraciones sobre las entradas y salidas de accionistas en su capital. Pero las fuentes de mercado consultadas insisten en que el millonario y filántropo ha realizado en España su segundo paso reconocible, después de su desembarco en FCC donde, por cierto, también entró comprando la autocartera de la constructora.
La operación no es de un gran calado económico, ya que como mucho puede alcanzar los 89 millones de euros que equivaldrían al 2,9% del capital, umbral hasta el que no es obligatorio declarar la posición.
Goteo de tycoons
Sin embargo, sí tiene un enorme peso simbólico y mediático, ya que reafirma el apetito de los grandes capitales por España, especialmente por compañías con presencia global. Prosegur está en más de 17 países y acaba de comenzar a operar en Australia.
Confirma, además, la llegada de los tycoons más importantes del mundo a un mercado que antaño ignoraron. Ahora, por el contrario, puede decirse que están claramente escudriñando al milímetro a España, buscando oportunidades que en el paado ni se plantearon.
Ahora son Gates y George Soros los magantes ultrafamosos que acaban de aterrizar. Carlos Slim ya está y en mercado se da por hecho que seguirá esta lluvia de megamillonarios. Entre las apuestas, Warren Buffet o Carl Icahn.
La compañía de seguridad ha podido presumir en casi siempre de ‘capital VIP’ en sus filas, no en vano ha contado como accionistas con los March, que acaban de deshacer su posición hace relativamente poco tiempo; tiene como consejero y accionista aPedro Guerrero, presidente de Bankinter y el apoyo de otros fondos de la talla de Fidelity, Oppenheimer o M&G.
Familiar
Otra característica que parece gustar a estos grandes millonarios mundiales es la condición de empresa familiar, algo en lo que coinciden tanto Prosegur como FCC. Pese a ser ya enormes multinacionales y contar en su capital con los grandes fondos del mundo, la constructora es controlada por Esther Koplowitz y su familia, mientras la familia Gutt-Revoredo también tiene una posición superior al 50% en la empresa. Los millonarios saben que nadie como la familia cuida de los intereses propios.
Eso sí, su escaso free float es el que provoca que Prosegur no esté en el Ibex (en su día lo estuvo) ya que la compañía capitaliza cerca de 2.500 millones de euros, un dato global que le situaría a la altura de Ebro Foods, FCC o Bolsas y Mercados de España (BME).
La firma puede considerarse sin duda un ‘valor seguro’, ya que su gráfico histórico es sostenidamente alcista (en enero tocó máximos), pese a los inevitables altibajos a lo largo de las crisis.
Cascade Investment tiene su sede en Boston, está dirigido porMichael Larson, y en EE UU rivaliza con Berkshire Hathaway a la hora de tomar posiciones fuertes en grandes empresas americanas.
Dentro de poco, tal vez mantengan esa rivalidad en España.