Aceptan penas de 11 meses y un año de prisión - La víctima ve doble desde la agresión
Dos vigilantes de un pub de Magaluf aceptaron ayer penas de once meses y un año de cárcel, respectivamente, por dar una brutal paliza a un turista. Los dos admitieron los hechos en la Audiencia Provincial de Palma y se declararon autores de un delito de lesiones. Ambos propinaron golpes en todo el cuerpo a la víctima, que pasó diez días hospitalizada y, entre otras secuelas, ve doble a consecuencia de la agresión. La fiscalía rebajó su petición inicial de cuatro años de cárcel tras alcanzar un acuerdo con las defensas y se apreció la atenuante de reparación del daño, pues han abonado ya 2.000 de los 15.000 euros con los que deben indemnizar a la víctima.
Los hechos se remontan a la madrugada del 27 de mayo de 2013. Los procesados, un británico de 29 años y un nigeriano de 38, trabajaban como encargado y responsable de la seguridad del pub Bananas, en Magaluf. Ambos tuvieron un encontronazo con un joven de 24 años al que acabaron agrediendo. Los dos acusados le asestaron numerosos golpes y puñetazos en el rostro y otras partes del cuerpo, e incluso continuaron pegándole cuando la víctima cayó al suelo. El joven sufrió traumatismo facial, fractura del suelo de la órbita derecha y abrasiones en las rodillas.
El perjudicado fue trasladado a un hospital, donde permaneció diez días ingresado. Tuvo que ser sometido a una intervención quirúrgica para implantarle material de osteosíntesis en la zona y recibió nueve puntos de sutura. Tardó dos meses en recuperarse y como secuelas padece diplopía (visión doble) en el ojo derecho y una perjuicio estético en la zona orbitaria derecha.
La fiscalía calificó los hechos como un delito de lesiones y solicitó cuatro años de prisión para cada uno de los acusados, así como su inhabilitación para ejercer como relaciones públicas y vigilante de seguridad durante ese periodo.
Sin embargo, el ministerio público rebajó ayer su petición tras alcanzar un acuerdo de conformidad con las defensas, apreciando la atenuante de reparación del daño por los 2.000 euros que han abonado ya a la víctima como indemnización. Los dos procesados se comprometieron a pagarle otros 13.350 euros por las lesiones que le causaron y las secuelas que padece a consecuencia de la agresión.