as hostilidades entre los sindicatos de la seguridad privada y Alcor se desataron después de que la empresa aprovechase un cambio legal introducido por la reforma laboral para rebajar los sueldos de sus trabajadores por debajo de los mínimos que marca el convenio genérico del sector.
¿Y ese grupo de trabajadores se opone a eso?
La empresa monfortina no fue la única dedicada a la seguridad privada en descolgarse del convenio, pero sí la primera en hacerlo. Al rebajar salarios, podía presentar ofertas más baratas a los concursos convocados por las administraciones públicas.
Con la de ayer, van dos veces que trabajadores de Alcor se movilizan en defensa de la empresa. La primera fue en mayo del 2014, cuando cuarenta de ellos se presentaron en el Ayuntamiento de Monforte para asistir como público a un pleno en el que el gobierno local iba a introducir como condición para optar a contratos municipales de servicios que las empresas aspirantes no empeorasen las condiciones laborales de sus trabajadores.
¿Y ese grupo de trabajadores se opone a eso?
En marzo del año pasado, cincuenta trabajadores de seguridad privada se manifestaron frente al juzgado de Monforte en una protesta muy parecida a la de ayer, pero de signo opuesto. Convocados por la Unión Sindical Obrera, un sindicato muy presente en el sector, reclamaban a las administraciones públicas que no contratasen a las empresas que ellos denominan piratas. La titular del juzgado número dos levantaba aquel día el secreto de sumario sobre la operación Muro y Carlos Somoza también había sido citado para declarar.
Por cierto USO ejerce la acusación particular en este caso.