Unos 150 representantes de empresas vinculadas a la recepción y gestión de alarmas y asociaciones de compañías de seguridad privada han acudido esta mañana a una jornada de trabajo sobre el sector inaugurada por el director general de la Policía, Ignacio Cosidó.
El evento ha servido para presentar dos proyectos vanguardistas para la modernización y mejora de la gestión y de la seguridad, especialmente de los vigilantes y policías que intervienen en la verificación y respuesta ante las alarmas. Además, se han presentado los datos de los años anteriores, según los cuales se ha pasado de casi 240.000 falsas alarmas comunicadas a las patrullas policiales en 2004 a unas 20.600 en 2012, lo que supone un descenso del 90%, que repercute positivamente en la seguridad ciudadana al no restar efectivos policiales a otros servicios.
Los dos proyectos presentados son el denominado Proceda, que contempla la creación de una plataforma informática para la comunicación electrónica de alarmas reales desde la central que las recibe al 091; y el proyecto Prisa (Procedimiento de Respuesta e Intervención Segura ante Alarmas), que recoge las normas básicas de actuación de la patrulla policial ante una situación de alarma. Ambos programas se enmarcan en el plan Policía 3.0 impulsado por el Plan Estratégico de la Dirección General de la Policía, que busca un patrullaje inteligente y la conversión de las Salas del 091 en centros de inteligencia, mando y control.
En esta jornada se ha abordado también el proyecto de Ley de Seguridad Privada, que se tramita actualmente en el Congreso de los Diputados. Cosidó ha destacado que “la seguridad privada es un complemento de la seguridad pública para garantizar un derecho social básico e imprescindible de todos los ciudadanos”. El director ha incidido en la “subordinación de la seguridad privada a la seguridad pública”. En la actualidad, existen más de 1.500 empresas autorizadas que realizan funciones de seguridad privada, integradas por más de 100.000 profesionales.