La Sección Segunda de la Audiencia provincial de Santa Cruz de Tenerife anuló en días pasados una sentencia condenatoria dictada en primera instancia contra un chófer del Parlamento de Canarias que atropelló con el vehículo oficial a un vigilante de seguridad del aeropuerto Tenerife Norte (Los Rodeos), en hechos que tuvieron lugar a primera hora del 5 de abril de 2011.
La decisión del alto tribunal provincial revoca la decisión adoptada por el Juzgado de lo Penal Número 6 de Santa Cruz de Tenerife, que en su día condenó al conductor a una pena de un año y seis meses de cárcel como autor de un delito de lesiones del que ahora es absuelto. También queda sin efecto la indemnización fijada entonces por un montante de 6.447 euros.
Para absolver al acusado, la Audiencia estima parcialmente el recurso presentado en un aspecto fundamental de la sentencia: la prueba. Si bien los magistrados consideran que el vídeo de lo sucedido prueba que el atropello existió, “difícilmente permite determinar con certeza y seguridad cuál fue el modo en que ocurrieron los hechos” ni tampoco “permite concluir con seguridad que el atropello tuviera carácter intencionado”.
Y es precisamente en la intención donde se basaba la sentencia de primera instancia, que daba por probado que el vehículo oficial sufrió un retraso a la hora de acceder al aparcamiento reservado para las autoridades en el citado aeródromo lagunero y su conductor, ahora absuelto de todos los cargos, arrolló con el vehículo oficial al vigilante de seguridad que le hacía indicaciones para estacionar.
Esguince de tobillo y desgarro de ligamento con secuelas
El vigilante de seguridad de Los Rodeos atropellado en 2011 por un chófer del Parlamento sufrió, como consecuencia de aquel suceso, una “contusión con esguince de tobillo y desgarro de ligamento para cuya sanidad precisó tratamiento médico rehabilitador con 90 días de cura quedándole como secuela una talalgia (lesión dolorosa del talón).