30 de agosto de 2016

La FTSP-USO Galicia, denunciará las irregularidades en el polígono Bértoa.

El polígono industrial de Bértoa tendrá dos gasolineras, una en cada fase
Por otro lado, la Federación de Trabajadores de Seguridad Privada-Unión Sindical Obrera (FTSP-USO) aseguró ayer, en un comunicado público, que acudirá a la Delegación del Gobierno para «denunciar» lo que califica de «irregularidades» en la seguridad del polígono
El polígono industrial de Bértoa, en Carballo, vive un momento de intensa construcción y asentamiento de empresas, tanto en las parcelas o naves en alquiler del privado como en la ampliación de Xestur. Tal vez por eso, y por las expectativas de que la segunda fase siga creciendo, aparecen nuevas iniciativas que nunca se habían planteado. O que, si lo hicieron (una vez hubo un atisbo de intento) no salieron adelante por diversos motivos.
Ahora mismo, sobre el papel, hay dos estaciones de servicio en marcha. El proyecto de una de ellas está más avanzado. Tanto, que ayer la Xunta de Goberno Local dio el visto bueno para la construcción de la gasolinera, que irá ubicada en las parcelas K5 y K6, en la zona nueva. La otra se ubicará en el polígono privado, en unos terrenos arrendados para tal fin muy cerca de la rotonda de entrada (acceso desde la AC-552, a pocos metros del vivero). Pero aún deberá esperar un poco más, ya que siguen adelante los trámites autonómicos, según señalaron fuentes municipales.
En la Xunta de Goberno de ayer también recibió el visto bueno el protocolo de actuación entre la Axencia Galega de Infraestruturas y el Concello para el itinerario peatonal y ciclista desde Bértoa (uno de los enlaces estará en el parque) hasta Carballo.
Denuncia por vigilancia
Por otro lado, la Federación de Trabajadores de Seguridad Privada-Unión Sindical Obrera (FTSP-USO) aseguró ayer, en un comunicado público, que acudirá a la Delegación del Gobierno para «denunciar» lo que califica de «irregularidades» en la seguridad del polígono, «incumpliendo la ley de seguridad privada», al respecto de falta de cualificación o habilitación como vigilantes de seguridad, algo que sería «muy grave», dice el sindicato.