Los colocadores han logrado vender ya los 375 millones de acciones de la filial del grupo de seguridad
Los colocadores han logrado vender ya los 375 millones de acciones de Prosegur Cash que comenzaron a vender el viernes de la semana pasada, según fuentes financieras. La primera salida a Bolsa del año en España está lista, con una demanda más que aceptable por parte de los grandes inversores, especialmente de los extranjeros.
El ejército de bancos contratado por la empresa de seguridad –BBVA, Banco Santander, Citi y Goldman, como coordinadores y también con Deutsche Bank, HSBC, JB Capital Markets, Itau BBA, Bankinter y CaixaBank– ha conseguido el dinero suficiente en un tiempo récord. El periodo de prospección concluirá el próximo miércoles 15 de marzo, el mismo día que se fijará el precio definitivo, con el objetivo de debutar el viernes 17.
Según la horquilla de precios, los títulos de Prosegur Cash debutarán a un precio de entre 1,95 euros y 2,35. Fuentes del mercado indican que el grueso de la demanda se acumula en la parte media de la banda. El free float –capital que cotiza libremente en Bolsa– se situará en el 27,5% como máximo, ligeramente por encima del mínimo exigido (25%). Es decir, Prosegur seguirá siendo el principal accionista con el 72,5% del capital.
Uno de los atractivos de la nueva cotizada será su atractiva política de dividendos. Cash prevé repartir entre sus accionistas entre el 50 y el 60% de su beneficio neto. La intención de la compañía es aprobar un primer dividendo a cuenta en diciembre de 2017 pagadero el 40% en diciembre de 2017, el 20% en marzo de 2018, el 20% en junio de 2018 y el 20% en septiembre de 2018. Este dividendo a cuenta sería sometido a la ratificación de la junta de accionistas de 2018. Superdividendo de la matriz
PROSEGUR 5,55 1,83%
La empresa de seguridad prevé ingresar entre 739 y 970 millones con la salida a Bolsa de su filial. El dinero obtenido con la operación será empleado en el “retorno parcial en efectivo a los accionistas de Prosegur del capital invertido[…]”. Es decir, la matriz repartirá un dividendo extraordinario, cuyo importe aún no ha sido fijado pero que variará, en función de distintos parámetros, entre los 0,6 euros y los 1,09 euros por acción.
Si entregara un euro por acción, la rentabilidad por dividendo de Prosegur por ese único pago rondaría el 18%; si fueran 0,6 euros, se quedaría en el entorno del 10%. La matriz prevé destinar entre 300 y 400 millones al crecimiento de los negocios de Seguridad y Alarmas, de forma que le quedarían limpios entre 370 y 670 millones de euros para el dividendo extraordinario. La matriz, controlada por la familia Revoredo con un 50,01% del capital, cuenta con 617 millones de acciones valoradas cada una en 5,56 euros a cierre de ayer.