Los métodos más utilizados en el robo de coches son: el toli, el robo del tapón de gasolina, el timo de las matrículas, el robo por satélite, el robo del segunda mano o el uso de inhibidores. Aunque el robo de coches se ha reducido en España en general en el último año la cifra ha descendido un cincuenta por ciento siendo menos de cincuenta mil los vehículos sustraídos en 2013, el índice de robos de coches de alta gama mantiene su trayectoria ascendente, de todos modos nuestro país sigue siendo uno en los que hay más posibilidades de que te roben el coche. Este tipo de delitos hoy día ha quedado en manos de grupos organizados, los cuales dan salida hacia fuera de España a los coches que roban, especialmente hacia Europa del Este o África, o los utilizan para el desguace de piezas. El tráfico ilícito de vehículos estaba controlado por delincuentes búlgaros y marroquíes, ahora se han sumado delincuentes polacos (especialistas en furgonetas) españoles, rumanos, ucranianos y lituanos, éstos últimos actúan principalmente en la zona de Levante.
La mayor incidencia de este delito se da en Madrid, Toledo y Alicante, siendo Cáceres una de las ciudades con menor índice de sustracción de vehículos.
Estos son los seis métodos más utilizados en el robo de coches, merece la pena tenerlos en cuenta ya que podremos reducir las posibilidades de que roben nuestro vehículo.
El primer método se denomina ‘Toli‘, la verdad es que es bastante ingenuo y nos puede hacer picar fácilmente. Consiste en atar a la parte trasera del coche unas latas, aunque también se utiliza el golpe con otro coche en la trasera del vehículo a sustraer. Generalmente cuando esto ocurre, el conductor se baja del coche dejando puestas las llaves, los cacos aprovechan la situación, se suben al coche y se lo llevan.
El segundo método es el ‘robo del tapón de gasolina‘, cuidado, quizá penséis que lo han robado para colocárselo a otro coche, pero en realidad se ha sustraído para hacer una copia de la llave. Una vez en posesión de la llave, los ladrones esperarán la oportunidad para llevarse el vehículo.
El tercer método es el ‘timo de las matrículas‘, pocos son los conductores que miran en la parte de atrás para comprobar si todo está en orden. En este caso se sustrae la matrícula trasera y se utiliza como gancho para detener a su propietario con la excusa de que se le ha caído, la dinámica es similar a la del primer método.
La cuarta opción es el ‘robo por satélite‘, una red dedicada al robo de coches coloca un chip rastreador para saber dónde está el vehículo. Este método suele utilizarse con los coches específicos de alta gama.
El quinto método está orientado a los coches usados, es el ‘robo del segunda mano‘, si pones a la venta tu coche y quieres que lo compre un particular para poder ganar más de lo que te darían en un concesionario o en una tienda especializada, corres el riesgo de quedar con un caco, cuando quedas con el supuesto comprador y le dejas que pruebe el coche, se lo llevará.
El sexto de los métodos más utilizados para robar coches es el ‘uso de inhibidores‘. Al aparcar utilizamos el mando para cerrar las puertas, un inhibidor se encarga de neutralizar la señal del mando y el coche se queda abierto. En este caso no está de más, una vez activado el cierre, comprobar que realmente las puertas están cerradas, es una simple comprobación que reducirá el riesgo de que nos sustraigan el vehículo.
Los grupos organizados dedicados a este tipo de delito suelen estar formados por los ‘ojeadores’, que seleccionan el vehículo (en ocasiones por encargo) y lo sustraen, los ‘eléctricos’, que lo falsifican -cambio de matrícula, documentación y número de bastidor, el color no hace falta-, un conductor que lo saca de España y un proveedor que lo vende en el extranjero. Normalmente estos vehículos sutraídos a sus propietarios se venden en Europa de Este o África.